La eternidad del instante

 


De como puede el sol de la mañana, suspendido sobre un mar en calma, redimirme
y transportarme a un lugar desconocido de mi propio universo.


traza un surco de fuego lacerante
y estalla de poder ante mis ojos
cuando agota su viaje por la lámina inmensa 
nimbando el horizonte
lamiéndose la sal

me sobrecoge tanto como me reconforta
la pasión del abrazo
dejándome temblar en el umbral del éxtasis

sólo pienso en fundirme con un todo
del que integro la parte más humilde
y la intuición me anuncia perdurable



Ultraversal  (Un instante eterno 16/12/2015)






La buena envidia

 


Me abruman los poemas que no entiendo

a pesar de leerlos varias veces.

En tantas ocasiones no siento buena parte

de todo lo que quieren expresar.

 

Densidad discursiva

intrincados lirismos

imágenes veladas, tan  sutiles,

son los recios escollos que me atoran.

 

Se me llenan los ojos de palabras

sin esponjar mis vísceras dispuestas.

No se abren las ventanas de mi compresión

ni consigo envidiar a quien lo escribe.

 

Pero no voy a  exigirle a los poetas

que acomoden su estilo a mi discernimiento.

 

La subjetividad es más ágil que yo

y acepto ser la cola del ratón

que nunca hace preguntas arriesgadas

por miedo a no saber descifrar las respuestas.

 

Si soy yo quien compone

procuro resultar inteligible.

 

Son buenos mis propósitos poéticos.

Mas luego me envilece

alguna ingobernable tentación

y en los ojos me lloran mis palabras



Origen


En demasiadas ocasiones no entiendo bien lo que leo

o es el discurso,  hecho maraña, que no se deja.

Se me llenan los ojos de palabras

sin esponjarme víscera alguna

ni permitirme envidiar a quien lo ha escrito.

No me atrevo a exigirle al mundo

que gire a la velocidad de mi entendimiento.

Además me he acostumbrado

a ser la cola del ratón que nunca pregunta.

Puede que tampoco descifrase las respuestas.

Cuando soy yo quien compone

es cierto que procuro hacerlo inteligible

porque son buenos mis propósitos

aunque luego, a veces, me dejo llevar

por algún impulso ingobernable

y en los ojos  me lloran unas palabras

que mis vísceras también rechazan

negándome hasta un ápice de la envidia propia.




Ultraversal 25/04/2021


Los olores del pasado

 


Me gusta que me embargue el olorcillo

de la presencia seca de los lápices.


Amo recuperar ese matiz

sentir como el perfume evoca unos recuerdos

lejanos que creía desterrados.


Cuando abría el plumier 

de madera pulida por el uso

y los dos pisos del portaaviones

que la imaginación infantil construía

se vaciaban del aire que alertaba a mi olfato.


Primero deslizando la cubierta

entre las rectas guías de fino ranurado

pivotando después sobre un extremo

para así desvelar la  bodega profunda

de aquel navío,  llena de fragancia.


Volver a oler recuerdos escondidos

me ayuda a revivir 

momentos del ayer.


Ultraversal 18/05/2016





La Navidad


(Heptasílabos y dodecasílabos)

Navidad, conjugando nevar y el patio

de la escuela vacía

acogiendo las voces del blanco coro,

hasta que la lección cubre los ecos

del juego de otros días.


Soledad, que recita la muda tabla

en las aulas desiertas.

El compás escurriendo por las paredes,

silenciando colores ya desvaídos.


Ante la gran pizarra, próxima al mapa,

el crucifijo hastiado

desmenuza sus sueños,

mientras ríos sin agua siguen el curso

que arrastra la desidia.


Sobre la cordillera de los pupitres

el sosiego redime las ciegas faltas

de cien ortografías

que partieron guerreras

hasta el año que viene.


Ultaversal 12/01/20121



Paranoias del espejo

 


Siempre me ha fascinado el cine mudo,

tanto como el misterio que encierran los espejos…

 

 

El encuentro

Ese hombre que me observa

bien sé que me conoce

porque así lo delata el charol de sus ojos.

Permanece suspenso, esperando tal vez

a que yo alce mi mano como en un saludar;

como en un acercarme

al desencanto azul de su pensar sombrío.

 

La seducción

Mi sonrisa lo atrapa

y capturo la luz

deslumbrante, fugaz, de su respuesta:

el soñar de sus labios en un momento libre.

 

Instante oscurecido cuando se troca en gesto

que presagia el fracaso de imaginables vínculos.

 

La desconfianza

Afloran los recelos, se abre un frío volcán,

que nos hacen dudar

de la intención del otro.

 

El rechazo

Qué es lo que ha cambiado,

lo que se ha perdido aun antes de nacer…

El tipo me contempla como si abominara,

como si nuestras dos realidades

fueran incompatibles frutos raros

de huertos antagónicos,

planetas orbitando en dispares, hostiles,

estirpes estelares: sin armonía alguna,

sin comprensión posible.

 

La indiferencia,  el desdén

Las miradas resbalan repeliéndose untuosas:

se eluden como polos literales

cuando se ignoran, dándose la espalda.

 

El temor

Temo al miedo a mirar al hombre que me mira.


Ultraversal  15/02/2016

 

 

 

 

De oficios y artificios. (¡Por qué no me hablas, maldito Moisés!)

 


La poesía consiste en trabajar emociones. No en verterlas sin más, sino en esculpirlas...

                                               ...porque la poesía en un arte, un artificio.

                                                                                  (Pepe Junco, poeta)

                                                                                           

 Recuperar  la felicidad a las seis de la mañana.

Tenía un culo con forma de culo.

Reflexiones en la sala de espera de un dentista.

Cómo conquistar a una diosa del sexo.

La flor que se obstinaba en brotar junto a los escoriales.

 

Si, con buen oficio, consiguiera esculpir

cada una de estas cinco emociones

puede que alcanzase el artificio final

de cinco apreciables poemas:

equilibrados, decidores

y con el adecuado nivel de discurso.

Porque hay quien defiende que el exceso

de naturalidad aniquila la poesía; 

como aquel vídeo que mató

a la estrella de la radio.

O que, al menos, la vulgariza.

 

Tengo cinco toscos bloques de idea

para tallarlos en versos consistentes,

u holgados y sueltos...

—que de eso no decía nada mi poeta de referencia—

hasta conseguir, en cualquier caso,

que canturreen pletóricos

y modulen, animados de lírica vida propia.

Que se defiendan por sí solos ante cualquier crítica.

Y ya, de paso, que alguien me diga

si esto es, o no es,  un puñetero poema.


Ultraversal 29/01/2016





Elogio y defensa de la blatta orientalis

 


Uno

que quizás fuera poeta

me dijo que se podía ser cualquier cosa

a través de la intención de lo escrito

porque el discurso es el disfraz

de las pretensiones de la razón.

También me aseguró

que los antónimos de humano

son palabra infinitamente más bella

que cualquiera de sus cualidades.

Que ser insecto no es peor

que la presunción de selectiva divinidad

en un Olimpo abismado al nivel de arrabal humilde

y erigido a golpes de ciego raciocinio.

Que por eso

a veces

no le importaría ser la más común de las cucarachas. 


Ultraversal  08/01/2016



Mesa Rodonda

 


Es grato el reencuentro 

con los condiscípulos, tan queridos

como la adolescencia que ayer nos hermanase.


Agrupados en torno a la mesa cordial

prestos a sostener junto al vino de hoy

las cálidas memorias del pasado.


Florecen esas charlas venturosas

reordenando el puzle de aquellos tiempos nuestros

que rescatamos, plácidos y limpios.


Latidos de ternura al contemplar los rostros

que delatan el paso de la vida

y angustian sus historias cuando duelen.


Se sienta con nosotros el recuerdo

de los que se fueron

y del resto ausente, que no quiso estar.



Ultraversal  (Reencuentro 17/10/2015)





El belén



Recuerdo el belén de montañas de corcho

que mi padre instalaba canturreando alegre

mientras que yo aprendía diligente a ser niño.


Las toscas figurillas con su aspecto rural

las brillantes lorigas de áspera purpurina

con que me seducían los soldados de Roma

y un variado montón de animalitos

moteando el perfecto decorado.


Mi padre me dejaba jugar con los pastores

sólo si eran los mancos y los cojos

mientras él esparcía arena y musgo

sobre la superficie del campo simulado.


Era al quedarme solo que aprestaba

mis bravos pieles rojas de irreverente plástico

al saco de las quietas gallinitas

antes las barbas mismas del viejo San José.


Ultraversal  (EL BELÉN-NACIMIENTO Y LITTLE BIGHORN 19/12/2015)



Despertares

 

Versión polimétrica 


Me despierto y las ansias de hablar de ciertas cosas

me llevan a pensarte.


Aunque también quisiera naufragar en tus labios

conquistar tus cabellos y ser un condenado,

preso en las orfandades de tu cuerpo.


Pero lo reconozco complicado.

En vez de presentirte en la distancia

debería soñarte en el lugar seguro

donde, al borde del mar, la ilusión nos engañe

haciéndonos creer

que seremos los últimos testigos

de las muertes del sol.



Origen del discurso

Me despierto con ganas de contarte muchas cosas.

 Aunque también me apetece

enredarme entre tus labios

tus cabellos

y las orfandades de tu cuerpo.

Pero eso sería harto complicado.

En vez de pensarte en la distancia

debería buscarte en  ese lugar

extremo e inatacable donde,

al borde del mar,

la ilusión pudiera hacernos creer

que tú y yo somos los últimos

en contemplar las muertes del sol.

Me pregunto cómo serán tus ganas,

tus deseos,

cuando despiertas.


Ultraversal  19/04/2021




El mundo, el domonio y la carne

 


A mi diablo
yo sé que le subyuga
poder mercadear con mi alma insana,
siempre que se la ofrezco en venal acto
a un precio que no puede rechazar.

A ese cabrón con pintas,
que me ha tocado en suerte
al repartir demonios personales,
regatear lo vuelve loco.

Le pone a cien hurgar en mis miserias
y tasarlas después muy a la baja.

El salaz indecente que es mi diablo
se traviste de súcubo carnal
y viene a turbarme los rincones
del espíritu en noches agitadas.

Dice que no se apaña estando solo,
que no le gusta,
que para algo se agencia él las almas...

Para tener algún impuro amigo



Ultraversal  17/11/2015





Benditas palabras

 


Benditas palabras

por ser las voces del cielo

los sonidos del Edén

el verbo de la gloria.


Dichas en el lenguaje de lo próximo

pronunciadas muy rotas

trasportadas  por un  susurro 

hasta nuestros oídos

alumbrándonos el éxtasis una y otra vez

como si fueran ángeles mensajeros de Dios.


Y en ellas nos hundimos

con ellas renacemos

entre ellas nos amamos.